domingo, 31 de diciembre de 2006

Somos como somos...!!!

Hoy me he vuelto a sorprender...

Desperté con su abrazo durmiente y sentí su respiración acompasada a mi lado, algunas pequeñas gotas de sudor asomaban por su rostro, era el calor de los cuerpos y el sol entrando por la ventana, y sentí, que así tan sencilla, atravesaba mis miedos, mis dudas y la besé... la besé como cuando aún era invierno y nuestras vidas se cruzaron, la besé con la sopresa de descubrirla, de sentirla, de vivirla y saber que me siente a mi también...
Hoy me he vuelto a soprender, leía sobre las mujeres en el tango y descubrí a una que le cantó a mi sorpresa...
Malena Muyala-Somos como somos

miércoles, 13 de diciembre de 2006

Ni Olvido Ni Perdón...!!!

Ha muerto el asesino, el dictador, el torturador, el violador, el secuestrador de niñas y niños, el ladrón, el inhumano, el traidor.... No lo olvides y sobre todo no olvides los nombres, los rostros de lxs asesinadxs, lxs desaparecidxs, los torturadxs, lxs agredidxs, de lxs que tuvimxs miedo, no olvides, aún con su muerte nada hay que celebrar.....



Mira!!!!!

Mira el rostro del asesino y su banda de secuaces!!!!

LOS ENEMIGOS

Ellos aquí trajeron los fusiles repletos
de pólvora, ellos mandaron el acerbo
exterminio,
ellos aquí encontraron un pueblo que cantaba,
un pueblo por deber y por amor reunido,
y la delgada niña cayó con su bandera,
y el joven sonriente rodó a su lado herido,
y el estupor del pueblo vio caer a los muertos
con furia y con dolor.
Entonces, en el sitio
donde cayeron los asesinados,
bajaron las banderas a empaparse de sangre
para alzarse de nuevo frente a los asesinos.

Por esos muertos, nuestros muertos,
pido castigo.

Para los que de sangre salpicaron la patria,
pido castigo.

Para el verdugo que mandó esta muerte,
pido castigo.

Para el traidor que ascendió sobre el crimen,
pido castigo.

Para el que dio la orden de agonía,
pido castigo.

Para los que defendieron este crimen,
pido castigo.

No quiero que me den la mano
empapada con nuestra sangre.
Pido castigo.
No los quiero de embajadores,
tampoco en su casa tranquilos,
los quiero ver aquí juzgados
en esta plaza, en este sitio.

Quiero castigo.
(P. Neruda)

NI OLVIDO NI PERDON